Día Mundial de las Frituras

El 2 de diciembre se celebró una de las efemérides más sabrosas y culposas del calendario: el Día Mundial de las Frituras… ¡Aunque Ud. no lo crea!

Este día, dedicado a rendir homenaje a todo lo que pasa por aceite caliente, es una excusa perfecta para disfrutar de esas delicias doradas que tanto nos encantan.

Y aunque oficialmente ya pasó, ¿quién dijo que las frituras necesitan una fecha específica para ser celebradas?

Desde los clásicos tequeños hasta los patacones, las empanadas, los bocaditos de yuca o los espectaculares chicharrones, los venezolanos sabemos cómo llevar nuestras frituras a otro nivel.

Pero esta celebración tiene una historia que vale la pena contar, y algunas curiosidades que te harán ver las frituras con nuevos ojos (aunque siempre con ganas de más).

¿DE DÓNDE VIENE EL DÍA MUNDIAL DE LAS FRITURAS?

El Día Mundial de las Frituras tiene sus raíces en el “Fritters Day”, una celebración no oficial de Estados Unidos que exalta el arte de freír.

Originalmente, se centraba en frituras como las verduras rebozadas, el famoso pollo frito o incluso el helado frito, pero esta técnica de cocción, que consiste en sumergir los alimentos en grasa o aceite caliente, es tan antigua como universal.

Los registros históricos indican que la fritura ya era popular en el antiguo Egipto, donde se cocinaban alimentos en aceite para conservarlos mejor; más tarde, la técnica fue adoptada y perfeccionada por las culturas árabe y mediterránea, quienes la llevaron al resto del mundo.

En cuanto a nuestra querida Latinoamérica, la fritura llegó con la colonización, pero rápidamente fue adaptada con ingredientes locales y técnicas autóctonas, convirtiéndose en parte esencial de nuestra gastronomía.

¿POR QUÉ AMAMOS TANTO LAS FRITURAS?

Empecemos por una gran verdad: la fritura no es solo una técnica, es magia culinaria.

Freír transforma los alimentos: los hace crujientes por fuera, tiernos por dentro y realza sus sabores. Además, las frituras tienen el poder de generar una conexión emocional; son esas “comidas felices” que nos acompañan en reuniones, celebraciones y meriendas.

En Venezuela, no hay fiesta sin tequeños, esos palitos de queso envueltos en masa que desaparecen tan rápido como salen de la cocina.

Los patacones, hechos con plátanos verdes fritos y coronados con carne, queso o aguacate, son otro favorito que combina lo tradicional con lo creativo.

Los bocaditos de yuca, ya sea solos, rellenos de queso derretido o carne jugosa, son la prueba de que la yuca siempre brilla cuando pasa por aceite caliente.

Y el chicharrón, crujiente y lleno de sabor, es ese snack irresistible que nunca decepciona.

FRITURAS EN LATINOAMÉRICA: TRADICIÓN Y CURIOSIDADES

Latinoamérica es una región que celebra la fritura en todas sus formas.

Cada país tiene sus propias delicias fritas que han pasado de generación en generación:

Venezuela: Además de los tequeños, los patacones, la yuca frita o el chicharrón, por supuesto destacan las empanadas, las tajadas y, por los lados de la tierra del Sol amada, las manducas o los tumbarranchos.
Colombia: Los buñuelos y las arepas fritas son clásicos, especialmente en épocas festivas.
México: Las quesadillas fritas y los churros son íconos de su cocina callejera.
Perú: Los picarones (rosquillas de camote y calabaza) son una joya dulce en su gastronomía.
Argentina: Las milanesas fritas, acompañadas de papas fritas, son un plato imprescindible en cualquier mesa.

En cada rincón de Latinoamérica, la fritura es sinónimo de sabor, tradición y celebración.

CONSEJOS PARA FREÍR Y DISFRUTAR COMO UN EXPERTO

El primer consejo es que siempre tengas alguna de nuestras delicias congeladas en tu nevera, para que nunca te quedes con las ganas.

Una vez resuelto este paso, hay que saber que freír es todo un arte, y aunque parece sencillo, tiene sus secretos:

Usa aceite limpio: El aceite debe estar fresco para que no altere el sabor de los alimentos.
La temperatura es clave: Si está muy baja, los alimentos absorben más grasa; si está muy alta, pueden quemarse sin cocinarse por dentro.
Siempre congelado: Los productos que se venden listos deben freírse congelados. No los saques con demasiada antelación de tu congelador, pues al descongelarse, el resultado final no será tan crujiente.
Evita sobrecargar la sartén: Freír en tandas pequeñas asegura una cocción uniforme.
Recalentar con cuidado: Las frituras nunca deben ir al microondas; un sartén o una freidora de aire son tus mejores aliados.

COME SABROSO, COME SIN CULPA.

Si después de tanto hablar de tantas cosas ricas y crujientes, ya se te hizo agua la boca, es hora de resolver.

En Panna New Food Latino, tenemos todos esos alimentos que necesitas para cualquier ocasión: tequeños recién hechos, patacones crujientes, bocaditos de yuca rellenos y conos de chicharrón llenos de sabor.

¿Lo mejor? Que también puedes llevarte nuestros productos congelados y freírlos en casa, disfrutándolos a tu gusto y en cualquier momento.

¡Visítanos y celebra esta genialidad de día, con el sabor auténtico de Panna!